PROGRAMA

 

11,30 h. – Desfile procesional de LAS DONCELLAS, ataviadas con sus    galas de novia, portando los típicos ramos de acebo adornados con flores blancas.

El trayecto (700 metros) será desde la parroquia hasta la Ermita de la Patrona del Pueblo, la Virgen del Roble.

La imagen que presidirá esta procesión será la de Nuestra Señora de La Hermedaña, Patrona de Las Doncellas.

Amenizarán el acto los Danzadores de Sorzano y la Charanga PK2.

 

12,00 h. – Misa de campaña en el anfiteatro instalado en las inmediaciones de la Ermita.

La homilía correrá a cargo de D. José María Alonso, Cura Párroco de Sorzano.

Actuará durante la ceremonia la Coral Virgen del Roble de Sorzano.

 

13,00 h. – Al finalizar la Eucaristía actuará el grupo de Danzas de Sorzano y a continuación se regresará en procesión hasta la parroquia, presidiendo en este caso el desfile de doncellas la imagen de Nuestra Señora del Roble.

 

13,30 h. – La Cofradía Virgen del Roble dará un aperitivo a Las Doncellas participantes y habrá reparto de caramelos donados por la firma “El Avión” para todos los asistentes.

 

 DONCELLAS

- INSCRIPCIONES -

 

En este maravilloso y espectacular desfile de novias participan Las Doncellas, que normalmente suelen representar a las treinta poblaciones circundantes a Sorzano, que antiguamente cumplían con este bello ritual secular.

 

Los trajes de novias deben ser blancos, sin velo.

Igualmente blanco deberá ser el calzado zapato o zapatilla).

 

Las inscripciones se hacen en la Parroquia o Cofradía, antes del 9 de mayo. Contactar co Erika Segura (636442244) o Arancha Peñagaritano (676680263), miembros de la Cofradía

 

Si no disponen de vestido de novia se les puede facilitar en las instalaciones parroquiales, pues la Cofradía cuenta con unos ciento treinta vestidos de todas las tallas.

 

Si a la hora que deseen probarse el vestido estuviera cerrada la parroquia, pueden solicitar que se les abra en la casa que se encuentra enfrente de la torre.

 

Los vestidos que aporta la Cofradía son prestados con las condiciones siguientes:

A/. Deben cuidarlos y no utilizarlos para otros fines.

B/. Se deben reintegrar antes de finalizar el mes de mayo, lavados y planchados.

C/. En ningún caso se deben ceder a otras compañeras sin que hayan firmado previamente la correspondiente ficha.

 

-       LA FIESTA –

 

Las chicas deberán personarse en la puerta de la Parroquia no después de las once de la mañana, ya vestidas de novia, para retirar el ramo de acebo del lugar que se les indique.

 

En la procesión el público no se puede entremezclar con Las Doncellas y éstas deberán guardar una compostura y respeto propios de este acto, tanto en la procesión como en la Eucaristía.

 

La presencia de doncellas de todas las poblaciones vecinas puede ayudar a crear amistades y lazos de unión entre los pueblos, dentro de un ambiente agradable y bello, que luego se completará en la fiesta posterior.

 

QUE EL BLANCO DE LOS VESTIDOS SEA PARA LAS DONCELLAS TODO UN SIMBOLO DE LIMPIEZA INTERIOR DE SU ESPIRITU.

 

Y QUE EL VERDE QUE OSTENTAN LOS ACEBOS EN SUS MANOS REPRESENTE LA ESPERANZA DE NUESTRA JUVENTUD FEMENINA CARA A ESTA SOCIEDAD QUE ESPERA DE ELLAS LO MEJOR, COMO MUJERES, ESPOSAS O MADRES DEL FUTURO.

HISTORIA

UNA FIESTA COMARCAL.

Los archivos municipales y religiosos de esta zona nos dicen que antes de la mitad del siglo XIX fue siempre una celebración de toda la comarca que a modo de romería y en fechas distintas, tenía cada pueblo, acudiendo a una ermita del monte, hoy en ruinas, denominada “La Hermedaña”.

 

MÁS DE TREINTA PUEBLOS.

Con mayor o menor número de documentos escritos y su correspondiente fuerza probatoria podemos destacar las siguientes villas participantes en aquellas romerías antiquísimas:

Nalda, Viguera, Castañares, Sorzano, Entrena, Manjarrés, Sojuela, Sotés, Hornos de Moncalvillo, Daroca, Fuenmayor, Albelda, Clavijo, Medrano, Bezares, Ventosa, Castroviejo, Santa Coloma, Panzares, Nestares, Torrecilla en Cameros, y las desaparecidas  Pavía, Tormenal, Velilla de Rad, San Martín, San Prudencio, Nobajas, San Martín, Urrilla y los “Corcuetos” de San Pedro, San Llorente, San Antolín y Nuestra Señora del Prado, que dieron origen a Navarrete.

 

LOS ORÍGENES ROMANOS.

Con toda fiabilidad podemos afirmar que se trata de una fiesta con origen netamente pagano y más en concreto romano, con los típicos matices de la primavera, los bosques, el despertar de la vida, la diosa de la Fecundidad, las ofrendas del acebo y de las flores, las novias o doncellas, etc., etc., máxime teniendo en cuenta la presencia de los numerosos vestigios romanos hallados en estos lugares.

 

EL TRIBUTO NO ES EL ORIGEN.

Independientemente de si se estableciera o no en esta zona este vergonzoso tributo, el hecho en sí de este hipotético pago nunca demostrado, no constituiría un origen, sino más bien un matiz añadido a algo ya preexistente; dicho de otra forma más clara: Si existió el tributo y luego se zanjó, pudo anexionarse ese matiz de “acción de gracias” a cualquier festividad ya instituida anteriormente (en nuestro caso cinco siglos antes).

Hay que poner de relieve que, efectivamente, en las poblaciones españolas en las que persiste todavía alguna conmemoración o recuerdo de ese “tributo” están presentes los típicos elementos de “las doncellas”, con el contrapunto del temible “agresor” de la época de la Reconquista y también esos otros “detalles”

Esencialmente romanos (Recordemos la fiesta de San Pedro Manrique con sus “Móndidas” o doncellas, el recuerdo de la liberación del “tributo” bonitamente escenificado, pero también: las hogueras y el pisado de las brasas, que son netamente romanas).

 

LA FIESTA EN LA ACTUALIDAD.

Al hundirse la vieja ermita de “La Hermedaña” en la mitad del siglo XIX, cada población de este entorno siguió teniendo algún acto conmemorativo dentro de su jurisdicción con los más variados matices; y, aunque con el paso del tiempo ya se han ido perdiendo casi todos esos recuerdos, todavía existen “restos” de esas antiguas romerías en Entrena, Sojuela, Manjarrés, Sorzano y otros lugares en distintas fechas de la primavera.

 

LA FIESTA EN SORZANO.

Sorzano ha mantenido al cabo de más de siglo y medio, en esencia, el mismo formato de las ancestrales romerías, con los desfiles de doncellas, los ramos de acebo y las ofrendas florales a la Virgen de la Hermedaña, que sustituyó a la diosa pagana cuando pisó esta tierra el cristianismo.

Quizá la razón de esta pureza en la conmemoración no sea otra que la proximidad geográfica de esta localidad a la ya legendaria ermita de “La Hermedaña”, y por supuesto a la custodia de la auténtica imagen titular en su propia jurisdicción.

 

PUNTO DE ENCUENTRO.

Qué interesante sería restaurar la famosa ermita (ya se está intentando con escaso apoyo de las autoridades competentes) y en alguna forma aquellas romerías a este santuario por parte de todos los pueblos del entorno y sus doncellas; pero hasta que ese día llegue, ahí está Sorzano, que en cada tercer domingo de Mayo sigue recibiendo con los brazos abiertos a las chicas de la comarca que quieran disfrutar en esa fecha de estas preciosas conmemoraciones, vestidas  con sus blancos atuendos de novia y conviviendo con toda la juventud presente.